Cómo tratar los objetos encontrados en la sala de pruebas
Otro elemento de prueba habitual que requiere especial atención son los objetos encontrados. Aunque no suelen estar relacionados con pruebas o delitos, es muy posible que el objeto sea una prueba y que el delito aún no se haya detectado o denunciado. Por este motivo, los objetos encontrados deben tratarse de forma muy similar a las pruebas reales.
Normalmente, los periodos de conservación de los objetos encontrados son más cortos que los de las pruebas. Algunos organismos pueden disponer de los objetos encontrados en tan sólo 30 días, mientras que otros los conservan durante más tiempo. Por lo general, si se examina un objeto y se identifica al posible propietario, el agente investigador o el personal de la sala de pruebas intentarán ponerse en contacto con él para que devuelva el objeto. Cuando se envíen cartas, es preferible utilizar el correo certificado, especialmente en el caso de objetos de gran valor.
Anime a sus agentes a ser discretos a la hora de registrar los objetos encontrados. La basura desechada, por ejemplo, es sólo basura, no objetos encontrados. Los artículos con número de serie deben comprobarse con el NCIC, y los resultados positivos o negativos de la búsqueda deben guardarse en el sistema de gestión de pruebas. Trate los objetos encontrados de la misma manera que trata las pruebas en lo que respecta al embalaje y al registro de la información en el sistema de gestión de pruebas. Los objetos de dinero encontrados deben ser contados por dos agentes antes de empaquetarlos. Las drogas encontradas deben contarse y pesarse, igual que las pruebas reales. Las armas de fuego encontradas deben asegurarse igual que las armas de fuego de pruebas antes de embalarlas. Introduzca toda la información detallada posible cuando añada los objetos encontrados al sistema de gestión de pruebas. Esto ayudará a identificar al propietario más fácilmente cuando se reclamen. Asimismo, puede considerar la posibilidad de publicar periódicamente una lista de los bienes encontrados en el sitio web de su departamento o en el periódico local, en un esfuerzo por devolver los bienes a su propietario.