CaseGuard – Redacción de documentos

CaseGuard se complace en anunciar que hemos añadido la redacción de documentos a CaseGuard Studio. El software está siendo utilizado tanto por registros públicos como por personal de investigación, y la redacción de documentos era una petición que ambos tipos de clientes habían estado solicitando. Con motivo del lanzamiento de esta potente incorporación, hablaremos de las distintas finalidades de la redacción de documentos y de cómo la necesidad de esta herramienta se está extendiendo a una serie de funciones en el ámbito de la aplicación de la ley.

Finalidad de la redacción de documentos

El propósito original de la redacción de documentos siempre ha sido sencillo. Formularios médicos, documentos gubernamentales, auditorías fiscales, documentos de empleados y cualquier otro documento que contenga información personal identificable y que, por una razón u otra, se entregue a un tercero. Esto, por supuesto, puede ser complicado en una situación legal, donde los documentos de esta naturaleza se proporcionan rutinariamente a través del proceso de descubrimiento. Como tal, las normas judiciales han dado forma a gran parte de la política y los procedimientos de los organismos gubernamentales y los proveedores médicos en cuanto a cómo y qué redactar.

La premisa básica es que la redacción de documentos tiene por objeto proteger a las personas. Pero con el tiempo, los principios de la redacción se han aplicado ahora a los secretos comerciales, la propiedad intelectual, la inversión privada, la estrategia potencial y un sinfín de otros detalles. Está claro que, en el mundo moderno, las cosas tienen el mismo valor que los datos identificativos de las personas. Este cambio de paradigma tiene un impacto significativo en la forma en que el gobierno redacta los documentos, especialmente cuando se trata de operaciones orientadas a la aplicación de la ley.

Descubrimiento de casos penales

Cuando se trata de descubrimiento, sabemos que los documentos juegan un papel en cada caso penal, y cada caso tiene documentos únicos, y cada uno requiere un análisis para la redacción. Ya se trate de información de identificación personal, la información que un informante confidencial proporciona que identifica sus relaciones con un objetivo, los detalles de investigación que no se hicieron públicos, y no están siendo utilizados por el abogado, y las técnicas de investigación que no son pertinentes a la acusación son sólo algunas de las consideraciones durante el descubrimiento.

Un abogado defensor puede argumentar la validez de las técnicas de investigación. Y los jueces se pondrán casi siempre de parte de sus argumentos, frente a los del fiscal. Es importante contar con una política respaldada por la ley y comprender que no todos los detalles de la investigación pueden protegerse. La mayoría van a formar parte de la proposición de prueba, en virtud del hecho de que están relacionados con el caso en cuestión.

Solicitud de registros por terceros

Un tema recurrente es el de los terceros desinteresados que solicitan todo lo que tiene un organismo policial durante un período de tiempo determinado. Puede tratarse de vídeos, informes de casos, registros de llamadas de servicio, y la lista continúa. Hay buenas razones para redactar estos documentos en mayor medida que los documentos que van a los tribunales. Puede haber detalles específicos que la agencia no quiera poner a disposición del público en general en el momento de la solicitud. Por supuesto, hay identidades que proteger, detalles personales e incluso ubicaciones documentadas que pueden necesitar ser redactadas, ya que su presencia puede establecer la implicación de determinadas partes.

Muchas terceras partes querrán argumentar sobre la recepción de copias redactadas, pero si su organismo ha adoptado la política de ocultar los conocimientos de la investigación al público en general, no habrá mucho que el solicitante pueda argumentar, especialmente ante un juez.

Procedimientos civiles

Aunque las fuerzas y cuerpos de seguridad puedan tener dudas al respecto, hay muchas razones para redactar los documentos que se presentan en procedimientos civiles. Los procedimientos civiles no abarcan a todas las personas o cosas. Por el contrario, son específicos de un hecho. Por ejemplo, supongamos que un agente es acusado de uso excesivo de la fuerza en un juicio civil. Por supuesto, el historial de formación de ese agente, su conocimiento de la política de uso de la fuerza y su conducta en el pasado podrían formar parte de la prueba. Lo que probablemente no formaría parte del descubrimiento es cómo iniciaron el evento que condujo al incidente de fuerza, o qué técnicas aplicaron para investigar la situación. El abogado del demandante puede pedir que no se redacten los documentos todo lo que quiera, pero a menos que pueda demostrar cómo se aplicarían esos elementos específicos a su demanda, redactar los elementos en cuestión está perfectamente bien. Aconsejamos revisar cada caso con el abogado de la agencia, ya que obviamente no todas las situaciones se pueden describir en términos generales.

Conclusiones

Las capacidades de redacción de documentos proporcionan a las fuerzas de seguridad una herramienta que facilita su carga de trabajo. Pero también significa que las exigencias que se les imponen son cada vez más específicas, y eso significa que el trabajo está evolucionando. Disponer de herramientas para realizar la multitud de nuevas tareas es un primer paso importante para mantenerse a la vanguardia.

Poder redactar audio, imágenes, vídeos y documentos, y mejorarlos, todo en un solo software, es una gran ventaja para las fuerzas de seguridad, ya que la necesidad de gestionar las solicitudes de registros y resolver los casos se unen en el uso de la redacción y la mejora de las pruebas digitales.

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