Videovigilancia para terminales de aeropuertos

Quizá no haya lugar que ilustre a la perfección la necesidad y el uso de la videovigilancia que las terminales de los aeropuertos. Los aeropuertos son múltiples lugares complejos que requieren inmensas medidas de seguridad y protección debido a la combinación de amenazas cambiantes a las que son vulnerables, como el terrorismo y los robos (de equipajes y otros artículos de gran valor), razón por la cual son los que más se benefician de los recientes avances en tecnología de videovigilancia. Los aeropuertos internacionales siguen estando regularmente en peligro, por lo que es necesario extremar las medidas para mantener la seguridad y la protección tanto de sus trabajadores como de sus pasajeros. La avanzada tecnología de videovigilancia está ayudando a los responsables de los aeropuertos a controlar a los pasajeros y las amenazas como nunca antes. La seguridad y la vigilancia aeroportuarias se refieren a la protección de los perímetros de los aeropuertos, los pasajeros de los aviones y la tripulación. Las medidas de seguridad aeroportuaria modernizadas se utilizaron por primera vez en la década de 1970, debido en parte a que los secuestros y atentados con bombas contra aviones comerciales eran el método elegido por las organizaciones terroristas extremistas. Pero tras varios acontecimientos a lo largo de la historia, sobre todo los cuatro atentados terroristas orquestados en Estados Unidos el 11 de septiembre de 2001, las medidas de seguridad y vigilancia de la aviación se han reforzado masivamente en todo el mundo.

Cámaras de vigilancia

Las cámaras de vigilancia están estratégicamente situadas en todo el aeropuerto para grabar todas las actividades que se realizan dentro y fuera del recinto. Las cámaras están instaladas en todas las entradas y salidas, con el fin de captar imágenes de cualquier persona que pase por el aeropuerto. También están situadas alrededor de las zonas de facturación de las aerolíneas y los controles de seguridad para obtener grabaciones de vídeo de las llegadas y actividades de los pasajeros, así como para rastrear comportamientos sospechosos y personas que puedan suponer una amenaza potencial para los viajeros. Las terminales, puertas y pasillos individuales también se vigilan durante el proceso de embarque, al igual que las zonas de recogida de equipajes; se trata de una medida para evitar robos y vigilar artículos potencialmente peligrosos.

Con tantas amenazas que vigilar, tanto dentro como fuera, la videovigilancia ofrece varias ventajas a las terminales de los aeropuertos. Los avances en la tecnología de vídeo están elevando la seguridad aeroportuaria a nuevas cotas en los siguientes aspectos:

• Reconocimiento facial y de comportamiento: Las cámaras de los aeropuertos están configuradas con un sofisticado software de aprendizaje automático que escanea el aeropuerto en busca de personajes sospechosos, contrabando potencialmente peligroso, e identifican tipos específicos de actividades cuestionables. Por ejemplo, las cámaras equipadas con una función de identificación facial sirven para identificar a todas las personas que pueden representar una amenaza para la seguridad, así como a las que figuran en la lista de vigilancia terrorista o en la lista de exclusión aérea, comparándolas con una base de datos de sospechosos conocidos que recopilan los organismos gubernamentales. Gracias a la tecnología de reconocimiento de comportamientos, una cámara puede detectar comportamientos inusuales, como la saturación repentina de una zona concreta del aeropuerto, movimientos inversos en los puestos de control, y también objetos y equipajes que se dejan desatendidos en lugares seguros y generan posteriormente una alarma. Además, con la introducción de tecnología de vídeo avanzada que se está incorporando a la zona exterior de la terminal, como el reconocimiento automático de matrículas, se pueden detectar los vehículos estacionados en el mismo lugar durante demasiado tiempo. Y además, al vincular las imágenes y grabaciones de CCTV a una base de datos de vehículos robados, el personal de seguridad puede detectar y prevenir un posible acto delictivo.
• Accesibilidad: Los sistemas de vigilancia digital suelen ir bien emparejados con formas innovadoras de mejorar las operaciones aeroportuarias y controlar las amenazas para rastrear a los pasajeros, y esto incluye poner en marcha la vigilancia basada en el Protocolo de Internet (IP). Al permitir que los flujos de vigilancia digital viajen a través de Internet, el sistema puede enviar datos de difusión al personal del aeropuerto en varios departamentos, como aduanas, fuerzas del orden, el personal de manipulación de equipajes y también el equipo de respuesta a emergencias, todos los cuales pueden supervisar las transmisiones de vídeo en estaciones de trabajo separadas desde distintos ordenadores.
• Vigilancia por protocolo de Internet: Los sistemas de videovigilancia basados en IP desempeñan un papel importante en la protección de los aeropuertos frente a actividades delictivas o terroristas. Estos tipos de sistemas de seguridad permiten el procesamiento de vídeo dentro de la cámara y pueden proporcionar información crítica a todo el personal del aeropuerto y garantizar que se mantengan los altísimos niveles de protección necesarios. Mediante la aplicación de análisis de vídeo avanzados, el personal de seguridad puede supervisar la actividad de un presunto delincuente, y de sus cómplices, en todo el aeropuerto, a través de vídeo capturado y en directo, comenzando desde el momento en que fueron vistos por última vez y siguiendo sus movimientos.
• Espacio de almacenamiento ilimitado: Con la ayuda de los sistemas de vigilancia basados en IP, las secuencias de vídeo se graban y almacenan digitalmente. Este método permite una cantidad prácticamente ilimitada de espacio de almacenamiento. Esta función también proporciona mejoras significativas en las capacidades de búsqueda para sus usuarios, ya que permite a los autorizados acceder a las imágenes archivadas del aeropuerto.
• Versatilidad: Los sistemas de videovigilancia basados en IP son versátiles y ajustables, lo que significa que pueden ampliarse para adaptarse a la expansión del aeropuerto, siempre que sea necesario. Se pueden conectar cómodamente cámaras adicionales a la red, puesto que la infraestructura necesaria ya está instalada, y el uso de codificadores digitales puede integrar las cámaras analógicas convencionales existentes en el aeropuerto en la nueva infraestructura del sistema.

En definitiva, un sistema integrado de videovigilancia que funcione en conjunción con los recursos de seguridad suficientes proporciona un entorno más seguro, sobre todo si se compara con cuando uno de los procedimientos de seguridad se aplica por encima del otro. Y esto se debe a que un sistema de vigilancia IP hará que sea muy conveniente para los funcionarios de seguridad vigilar casi simultáneamente múltiples fuentes y supervisar de cerca el interior y el exterior de una terminal de aeropuerto; las cámaras de vigilancia ofrecen una resolución de vídeo mejorada, una funcionalidad de detección de movimiento mejorada y sofisticadas capacidades de seguimiento para la seguridad del aeropuerto, mientras que los datos transmitidos por Internet unifican al personal del aeropuerto, lo que les permite ser más proactivos, en lugar de reactivos, en su respuesta a las amenazas potenciales.

La FOIA y su relevancia para la vigilancia aeroportuaria

Por diversos motivos, que incluyen la realización de investigaciones, el refuerzo de teorías o la pura curiosidad, ha aumentado el número de solicitudes de información captada por cámaras de vigilancia por parte de ciudadanos y entidades privadas a organismos federales. En virtud de la Ley de Libertad de Información, las autoridades aeroportuarias y los organismos gubernamentales, como el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), están obligados a responder a las solicitudes de información que obren en su poder. La Ley de Libertad de Información, o FOIA (Freedom of Information Act), fue una ley federal promulgada por el Presidente Lyndon Johnson. Se promulgó con la intención de aumentar la transparencia y la responsabilidad de los organismos gubernamentales, otorgando al público el derecho a acceder a los registros de cualquier organismo federal. Cuando el público no puede acceder fácilmente a la información gubernamental, tiene la opción de presentar una solicitud en virtud de la Ley de Libertad de Información. En virtud de la FOIA, cualquier persona, sea o no ciudadano de Estados Unidos, puede solicitar información, y por esa razón es increíblemente importante que las autoridades aeroportuarias protejan la identidad y la intimidad de los viajeros, especialmente de los menores, e incluso de los comisarios aéreos cuya eficacia laboral depende de que trabajen de incógnito.

Las grabaciones de vídeo se consideran registros públicos en virtud de las leyes sobre el derecho a saber y, aunque existen exenciones diseñadas para garantizar que se mantiene la protección de la identidad personal, las grabaciones de vídeo, previa solicitud, siguen estando disponibles para su visualización. Esta práctica es legal siempre que la información sensible se haya redactado antes de compartir el contenido de los registros. Por lo tanto, las agencias gubernamentales y las autoridades aeroportuarias deben aplicar técnicas de redacción de audio y vídeo para ocultar detalles específicos recogidos que impidan el anonimato y la privacidad de una persona. Esta acción se realiza mediante el uso de herramientas de software de redacción de audio y vídeo; la redacción de audio y vídeo protege la identidad de los ciudadanos privados. Redactar un vídeo y su sonido implica ocultar detalles distintivos y marcas grabadas en la cámara. La información identificativa suele incluir rostros, voces, tatuajes y cicatrices, documentos de viaje y la página de información del pasaporte, que contiene los datos necesarios del portador. También consta de las matrículas de un vehículo. Normalmente, el software de redacción automatizada produce una redacción rápida y sencilla de archivos de audio y vídeo mediante el uso de la redacción automática basada en el reconocimiento de patrones. El software de redacción automatizada utiliza inteligencia artificial y aprendizaje automático espectacular para ocultar información privada; este método es preferible porque el software de redacción de vídeo que requiere que el usuario redacte las imágenes manualmente puede llevar mucho tiempo y ser costoso (ya que la persona encargada de redactar los archivos cobra por hora). La ofuscación de información consiste en borrar, difuminar o pixelar determinadas regiones, lo que impide determinar qué se oculta. Las grabaciones de audio que revelan información sensible suelen sustituirse por silencio. Estos programas de redacción de audio y vídeo ayudan a garantizar que las solicitudes FOIA se tramiten y se concedan, todo ello salvaguardando la privacidad de las personas.

Conclusión

Aunque a menudo se considera un mecanismo valioso para disuadir (o capturar) actividades delictivas y proteger al público, la creciente popularidad de la videovigilancia ha dado lugar a una sociedad en la que se vigilan los movimientos y comportamientos de todo el mundo y se recopilan grandes cantidades de datos. Como consecuencia, la protección de la información privada obtenida se ha convertido en una preocupación clave. Y, en consecuencia, la redacción de audio y vídeo de información personal y protegida está cobrando cada vez más importancia. El uso de software de redacción permite a las agencias federales, como el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y las autoridades aeroportuarias, cumplir con la política pública de la FOIA de que el público debe ser informado de los asuntos gubernamentales, todo ello protegiendo la privacidad de los ciudadanos privados.