Proteger la seguridad nacional dentro y fuera con metadatos
December 04, 2024 | 9 minutes read
Muchos usos de los metadatos
Los metadatos, o datos sobre datos, existen desde hace cientos de años. Cuando los antiguos eruditos colocaban etiquetas con los detalles necesarios del contenido en los pergaminos adjuntos para organizar la biblioteca, creaban un tipo de metadatos. La etiqueta contenía datos como el autor, la fecha de publicación y la descripción del contenido. Todos los detalles que describían el pergamino y su contenido. Cuando los filósofos, educadores y dirigentes buscaban en la biblioteca pergaminos específicos que contuvieran determinada información, podían encontrar fácil y rápidamente el contenido. Hoy tenemos archivos de datos, imágenes y bases de datos. La tecnología ha creado una forma totalmente nueva de ver los metadatos.
Los analistas han descubierto que los detalles incluidos en los metadatos tienen múltiples propósitos. Son datos que permiten realizar búsquedas y que pueden ayudar a localizar información relevante y conectar recursos. Los metadatos ayudan a organizar los recursos electrónicos, proporcionan niveles de información de identificación y pueden utilizarse para archivar y conservar recursos. Por ejemplo, un archivo de imagen contiene metadatos ocultos. Los detalles o datos que podrían encontrarse son la fecha en que se tomó la foto, las coordenadas GPS de dónde se localizó, el nombre del autor o fotógrafo, la hora del día o incluso el tipo de configuración de imagen utilizada en la cámara.
Si se tuviera acceso a bancos de datos como ICREACH u otros intercambios de datos federales, los metadatos recogidos en Internet podrían ocultar detalles útiles. Si se produjera un delito importante en un lugar público, podría ser útil una búsqueda de imágenes tomadas ese día en el GPS del lugar del delito o en sus alrededores. Es la capacidad de conectar los datos directamente con un individuo, una situación o un caso lo que hace que los datos aporten tanta transparencia a la vida de los estadounidenses.
Según David Stupples, catedrático de la Facultad de Matemáticas, Informática e Ingeniería de la Universidad de Londres, “los metadatos, los datos de las comunicaciones, pueden aportar ahora información sorprendente sobre individuos y grupos, sobre todo cuando se recogen en grandes cantidades en toda la población”.
Metadatos para la seguridad nacional
Si todos los archivos contuvieran metadatos, el número de datos dados y almacenados sería astronómico. ¿Cuáles son los posibles usos de los vastos almacenes de metadatos? Para entenderlo, lo primero que hay que ver es qué tipo de datos estarían disponibles a través de los metadatos. A lo largo del día, generamos continuamente algún tipo de metadatos. A través del teléfono, Internet, el correo electrónico, etc., hay infinidad de metadatos sobre las personas. ¿Qué tipo de información facilitan sus metadatos?
- Teléfono fijo: Los datos que se pueden averiguar de tu teléfono fijo podrían ser con quién has hablado, cuándo y durante cuánto tiempo.
- Correo electrónico: Puede incluir tu dirección IP, a quién, cuándo y el tipo de contenido que envías por correo electrónico, así como información del asunto.
- Navegación por Internet: La navegación por Internet deja oleadas de detalles como el tipo de ordenador y navegador que utiliza, qué sitios web ha visitado y las páginas que le interesan. Otra información podría incluir tus datos de acceso, visitas anteriores a un sitio web a través de cookies y almacenamiento de datos en caché.
- Teléfono móvil: Tu teléfono móvil puede dar detalles de tus llamadas, de forma similar al teléfono de casa, pero también puede incluir la localización GPS durante el tiempo que tu teléfono ha estado en uso, dando detalles como los lugares visitados con frecuencia o la localización geográfica de tu casa.
- Imágenes digitales: Muchos desconocen los muchos detalles que se dan al colgar una foto en Internet, como cuándo y dónde se tomaron, el tipo de cámara utilizada y su configuración en ese momento.
Aunque a algunos activistas de la privacidad les dé escalofríos, el gobierno recopila este tipo de datos por motivos de seguridad nacional. Esto ayuda a las fuerzas de seguridad cuando necesitan localizar a un sospechoso peligroso o incluso a un terrorista. A menudo no lo tenemos en cuenta cuando vemos las noticias. Como en un atentado terrorista, vemos un incidente en el los detalles que se averiguan sobre el atacante, las cuentas de las redes sociales, la familia y los amigos nos llegan al instante. La mayoría no se da cuenta de que el atacante ha dejado un rastro de metadatos, y los analistas lo siguen rápidamente.
Metadatos en el campo de batalla
Aunque a nadie le gusta la idea de la guerra, siempre es mejor estar preparado por motivos de seguridad. El creciente campo del análisis de metadatos se ha abierto camino en el campo de batalla.
En situaciones con recursos analíticos limitados, centrarse en los metadatos puede ser la estrategia más potente para los analistas de inteligencia de señales (SIGINT) en lugar de investigar el contenido de un mensaje. Según el profesor Stubble, “puede aportar mucha más información con el mismo esfuerzo”.
En situaciones tácticas, el tiempo es un bien valioso. Puede ser una cuestión de vida o muerte. Los metadatos son útiles en el campo de batalla, ya que pueden aportar más información en menos tiempo que trabajar con un cifrado de alto grado para descifrar el mensaje. En el campo de batalla, los datos se necesitan en segundos o minutos; el tiempo de reacción marca la diferencia.
El profesor subraya la utilidad de los metadatos en situaciones tácticas en las que el tiempo es esencial. “Si se utiliza un sistema de comunicaciones, gran parte de la carga útil puede ser un cifrado de alto grado que no se pueda descifrar a tiempo mediante criptoanálisis”, explica. “En una situación táctica, la información se necesita en cuestión de segundos o minutos, y es posible que no puedas hacerlo. Se tarda horas, quizá días, en descifrar el código. Entonces, ves qué más es útil, y hay una enorme cantidad de información en los metadatos”.
Si nos fijamos en los metadatos, hay información disponible de inmediato. Los metadatos incluyen los servicios de geolocalización de donde procede la señal. En el campo de batalla, la capacidad de leer metadatos puede determinar con precisión dónde se encuentra el enemigo. La información del GPS proporciona la ubicación del emisor de la señal de datos con una precisión de 100 metros. Esto permite a los militares planificar, responder y/o fijar objetivos. Este tipo de información no puede esperar días para ser cifrada.
Los metadatos también incluyen otra información sobre la comunicación. El número IMEI, un código único de 15 dígitos, corresponde a cada teléfono móvil o dispositivo de banda ancha. Este número es el número internacional de identidad del equipo móvil, que todo aparato lleva incorporado. Los metadatos tienen un valor incalculable. Proporcionan detalles sobre el número IMEI que realiza la llamada, el punto final o receptor de la comunicación y detalles sobre el contenido del mensaje o la carga útil. Detalla si se trata de un mensaje de texto, una llamada de voz, una imagen o un vídeo. La información puede obtenerse en cuestión de segundos.
Los metadatos incluyen información sobre la duración de la comunicación. Si a continuación se siguen los metadatos a partir del número IMEI específico interceptado, se detallarán todas las demás llamadas realizadas, su duración y a quién. Esta cantidad de datos proporciona detalles sobre la red de la persona.
También hay un factor de veracidad. Según Stupples, “no se pueden cifrar los metadatos porque el otro extremo tiene que ser capaz de interpretarlos”.
Stupples también nos advierte de que “sólo con el uso de las nuevas tecnologías, como los teléfonos inteligentes y las redes sociales, dejamos rastros ricos y reveladores de metadatos mientras nos movemos por la vida cotidiana. En conjunto, los metadatos de un grupo pueden revelar entresijos de asociaciones sociales, políticas y religiosas”.
Desde la perspectiva de un agente que realiza labores de vigilancia, el contenido de la conversación de una persona puede ser menos significativo que cuándo, dónde y con quién habla. Con el tiempo, los metadatos revelan patrones generales de vida. El análisis de metadatos suele denominarse “análisis de tráfico” y puede proporcionar detalles más ricos sobre un individuo. Puede divulgar atributos de su personalidad, señalar directamente a amigos y parientes cercanos y ofrecer un rastro detallado de las actividades diarias de la persona. Si la preocupación se centra principalmente en el contenido de la conversación, puede perderse información significativa. También existe la idea de que la gente puede mentir en las conversaciones, pero es más difícil ocultar mentiras en los metadatos.
Si mejoramos nuestra tecnología de guerra electrónica, estaremos mejor preparados para las circunstancias del mañana. Se trata de potenciar el SIGINT y la inteligencia humana. Hay casos en los que la información del radar puede ser contradictoria. En estos casos, la aeronave no dispondría de todos los datos correctos para compensar los nuevos detalles. Contar con inteligencia humana en tierra que pueda leer con precisión los metadatos y dar un informe completo de más información a la aeronave en tiempo real marcará la diferencia.
¿Hay futuro para la legislación?
Con tanta información que se puede extraer de los metadatos, ¿habrá algún tipo de legislación en el futuro? Es probable. En países como Australia ya se está debatiendo una normativa. Se señaló que el gobierno ya cuenta con cierta legislación relativa al acceso a los metadatos. Aun así, se ha demostrado que se ha accedido ilegalmente a los metadatos de periodistas y de más de 3.365 ciudadanos. A pesar de la normativa, ésta tiene décadas de antigüedad y contiene muchas lagunas.
Estados Unidos va por detrás de otros países a la hora de promulgar leyes de privacidad. La NSA registra regularmente los metadatos de Internet de todo el planeta durante un año. Almacena estos datos en su base de datos MARINA. La agencia también registra SMS y mensajes de texto similares en todo el mundo a través de DISHFIRE. La información se presenta cuando es necesario examinar más de cerca a un sospechoso o a una persona. Suele utilizarse para el análisis de patrones de vida. EE.UU. ha tomado algunas medidas legislativas previas en relación con los metadatos, que están desfasadas para 2020. La normativa estadounidense ha definido que “las personas estadounidenses no están exentas porque los metadatos no se consideran datos según la legislación estadounidense (sección 702 de la Ley de Enmiendas FISA)”.
A medida que los defensores de la privacidad llaman más la atención sobre el coste de la falta de privacidad personal, los ciudadanos se unen y exigen protección. Al igual que el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) se promulgó en la UE, California le ha seguido con la Ley de Privacidad del Consumidor de California; el gobierno federal pronto tendrá que seguirle para aprobar una legislación de privacidad para todos los residentes de Estados Unidos. Esta legislación debería incluir cambios en sus anteriores determinaciones relativas a los metadatos. Hay un mundo de información contenida en los metadatos; considerarlos no datos es obsoleto.