CCTV y seguridad en centros comerciales
November 21, 2024 | 5 minutes read
Hoy en día, el circuito cerrado de televisión (CCTV) se utiliza de diversas formas para fomentar la seguridad en el entorno laboral y mejorar la productividad.
Con los avances tecnológicos y el aumento de la competencia en el mercado minorista, ahora es habitual que los sistemas de vigilancia contengan dos componentes:
- Equipos físicos en la tienda, como cámaras, y
- Acceso a una solución basada en la nube que permite el análisis de datos, el almacenamiento sin restricciones y el acceso remoto a través de ordenadores y smartphones.
Dadas estas características, la vídeovigilancia desempeña hoy un papel indispensable en los comercios minoristas modernos. He aquí algunas áreas clave en las que la vídeovigilancia ayuda a los minoristas:
- Prevención de pérdidas La vigilancia por CCTV desempeña un papel esencial para evitar pérdidas en todas las tiendas minoristas, independientemente de su tamaño. La videovigilancia le permite rastrear y captar en tiempo real cualquier actividad o individuo sospechoso en su tienda. Lo mejor de todo es que, en muchos casos, la videovigilancia utilizada fuera del horario laboral le avisará inmediatamente de cualquier intento de irrupción en su negocio.
- Obtención de pruebas En muchos casos, las imágenes de videovigilancia pueden utilizarse como prueba en un procedimiento judicial. Tanto si le preocupan los ladrones como la mala conducta del personal, las imágenes de vídeo pueden ayudarle a defender su caso y proteger su propiedad.
- Prevención del fraude El robo de empleados es una preocupación crucial para la industria minorista. Según la Encuesta Nacional de Seguridad Minorista de 2018, la pérdida media en dólares por empleado deshonesto es de aproximadamente 1.264,00 dólares. El uso de la supervisión por CCTV puede disuadir a los trabajadores de participar en fraudes, dadas las responsabilidades legales a las que se enfrentan.
- Supervisión Mediante la vídeovigilancia, los gerentes pueden hacer un seguimiento del rendimiento del personal y verificar que sus empleados prestan un excelente servicio al cliente. Además, las imágenes de vídeo pueden analizarse para ver cómo interactúan los consumidores con el espacio comercial y el personal. Con el tiempo, estos datos se pueden utilizar para buscar formas de programar personal adicional durante los periodos de mayor afluencia del año.
- Almacenamiento a largo plazo más barato Muchos sistemas de vídeovigilancia facilitan ahora al empresario el almacenamiento a largo plazo de las grabaciones. Las tecnologías más antiguas hacían que el almacenamiento de las grabaciones resultara caro. Ahora, con el almacenamiento basado en la nube, los empresarios pueden cargar sus grabaciones en un entorno seguro al que pueden acceder fácilmente.
- Control y acceso remotos Los últimos sistemas de vigilancia por CCTV permiten controlar a distancia las grabaciones de seguridad en directo. Desde cualquier lugar del país, ahora es posible acceder a un vídeo, ya sea desde un ordenador, una tableta o un teléfono inteligente.
La ley de privacidad y su relación con la vídeovigilancia
Los minoristas de la industria privada estadounidense tienen que cumplir diversas formas de regulación. A lo largo del siglo XX evolucionó el “derecho a la intimidad”, pero los juristas consideran que este derecho sólo protege contra la intrusión federal. En consecuencia, existe una serie de leyes federales destinadas a proteger los datos personales de los individuos o relacionadas con la ciberseguridad. Estas leyes incluyen la Ley de Privacidad, la Ley Gramm-Leach-Bliley, la Ley de Portabilidad y Responsabilidad de los Seguros Médicos y la Ley de Protección de la Privacidad Infantil en Internet. Su aplicación corre a cargo de numerosas entidades gubernamentales, como la Comisión Federal de Comercio (FTC), la Oficina de Protección Financiera del Consumidor (CFPB) y el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS).
Sin embargo, ninguna ley federal controla de forma exhaustiva la recopilación y el uso de datos personales por parte de los usuarios. En busca de un sistema de protección de datos más completo, California y la Unión Europea (UE) han promulgado recientemente leyes de privacidad que regulan prácticamente todos los tipos de datos personales en sus territorios.
Aunque la legislación federal no aborda explícitamente el uso de cámaras de vigilancia, la interpretación de “información personal” es lo suficientemente amplia como para incorporar imágenes individuales y secuencias de vídeo. Esto significa que no es necesario que una empresa conozca el nombre o los datos de una persona, basta con que ésta pueda ser identificada a partir de las imágenes o grabaciones de vídeo. Desde un punto de vista práctico, esto implica que la grabación de imágenes de vídeovigilancia conlleva la recopilación de cantidades considerables de datos personales, lo que da lugar a obligaciones precisas en virtud de la Ley de Protección de la Intimidad a la hora de recopilar, utilizar y divulgar dicha información.
Cómo pueden los minoristas cumplir la Ley de Protección de la Intimidad
Hay muchas medidas importantes que los minoristas pueden tomar para asegurarse de que sus sistemas y políticas de vídeovigilancia cumplen las leyes de privacidad estatales y federales. Estas son algunas de las medidas fundamentales que pueden adoptar los minoristas:
- Disponer de una política de privacidad clara y actualizada en la que se detalle cómo se utilizan las cámaras de vídeovigilancia y qué se hace con las grabaciones, incluidas las técnicas de procesamiento de las secuencias, como la edición de vídeo y audio;
- Incluir avisos en las tiendas que informen a los clientes sobre la vigilancia por CCTV, quizás incluso con detalles sobre su política y prácticas de privacidad;
- Asegurarse de que las relaciones con el proveedor del software de vigilancia garantizan la coherencia con la Ley de Privacidad (incluido dónde se almacenan los datos, la eliminación de los rostros de menores y civiles, y los derechos de acceso según la Ley de Libertad de Información); y
- Cuando se conserven datos de vídeo, asegurarse de que se toman todas las medidas apropiadas para proteger la información personal contra el abuso, la intrusión y la destrucción, así como contra el acceso, la alteración o la difusión no autorizados, y mantener el ciclo de vida de la información.