India, Twitter y la moderación de contenidos, nueva demanda

En julio de 2022, se anunció que la multinacional tecnológica Twitter, Inc. demandaba al gobierno indio por censurar el uso de la plataforma de medios sociales en el país. Como referencia, India es el segundo mayor mercado de Internet del mundo, sólo por detrás de China en cuanto a número de ciudadanos con acceso a servicios en línea. La demanda interpuesta por Twitter responde a las “órdenes de bloqueo de tweets y cuentas” que, según la empresa de redes sociales, se dictaron de forma arbitraria y desproporcionada. Por otra parte, la demanda también representa una tendencia más amplia que ha tenido lugar en el país de la India en los últimos 2 años, ya que el gobierno indio ha tomado medidas para bloquear efectivamente una amplia gama de contenido de los medios sociales, incluyendo pero no limitado a los mensajes que son críticos de los funcionarios electos dentro de la India.

Nuevas normas informáticas de la India

El 10 de agosto de 2021, importantes publicaciones de todo el mundo informaron de que la India había aprobado un nuevo conjunto de normas de TI que pretendían regular el uso de los principales servicios de medios sociales y en línea de una manera que fuera más eficaz desde la perspectiva del gobierno indio. Aunque estas nuevas normas iban dirigidas a varias empresas tecnológicas multinacionales en general, como Google y Meta, entre otras, Twitter, en particular, había estado sometida a escrutinio en la India en los meses anteriores debido a la decisión de la empresa de medios sociales de no bloquear determinados tuits y contenidos “que el gobierno indio había considerado censurables”. En este sentido, el gobierno indio amenazó con emprender acciones legales contra los ejecutivos de Twitter en febrero de ese mismo año y ordenó a la empresa de medios sociales que restringiera a determinadas personas del país la publicación de contenidos en el sitio web.

En respuesta a estas demandas, Twitter suspendió finalmente a cientos de usuarios de la red social, aunque estas suspensiones sólo se aplicaron en India y las cuentas seguían siendo accesibles para los internautas de cualquier otro país del mundo. Aunque estas cuentas publicaban contenidos muy diversos, se centraban sobre todo en los agricultores que protestaban contra las recientes reformas agrícolas aprobadas en Nueva Delhi, la capital del país. Se calcula que Twitter tiene 75 millones de usuarios sólo en la India, por lo que estas demandas del Gobierno eran sin duda preocupantes. Por un lado, estas acciones censuraban de hecho las voces en línea de algunos ciudadanos indios. Por otro lado, las plataformas de redes sociales como Twitter tienen un largo historial de fracasos a la hora de moderar contenidos de forma eficaz.

La historia de Twitter en India

Aunque pueda parecer que Twitter promueve la libertad de expresión de los ciudadanos indios con respecto a su demanda contra el gobierno indio en julio de 2022, el gigante de las redes sociales tiene un historial accidentado en lo que respecta a la moderación de contenidos en el país en general. Para ilustrar este punto, el político indio T. Raja Singh, acusado de promover el discurso del odio y la persecución de ciertas facciones religiosas en la India, utilizó Twitter en el pasado para transmitir mensajes a la población india e instó a otros usuarios del sitio web a ayudar a que sus tuits se hicieran virales. Twitter sólo eliminó los tuits de Singh después de que el periódico tecnológico TechCrunch, con sede en Estados Unidos, llamara la atención sobre ellos en 2020.

Aunque Twitter eliminó finalmente los tuits de la red social, todos los usuarios de Twitter habían podido acceder a ellos durante más de tres años. Además, TechCrunch también encontró tuits similares publicados por Singh que seguían siendo accesibles a través del sitio web, lo que pone en duda la legitimidad del papel de Twitter en la protección de la población del país. Por ejemplo, el Wall Street Journal informó en agosto de 2020 de que “una alta ejecutiva de Facebook en India había decidido no tomar medidas contra las publicaciones de Singh por temor a que pudieran perjudicar las perspectivas de negocio de la empresa en el país” en relación con mensajes similares que Singh también había publicado en Facebook.

Privacidad frente a beneficio

Independientemente de las opiniones políticas de los cargos electos de la India, o de los puntos de vista de grandes empresas tecnológicas como Twitter Inc. con respecto a la libertad de expresión en todo el mundo, la forma en que estas empresas se han integrado en el tejido de nuestra sociedad moderna ha hecho que situaciones como la demanda de Twitter contra el gobierno indio sean una realidad casi inevitable. En la última década, las redes sociales se han utilizado para amplificar el discurso del odio y las prácticas discriminatorias en países de todo el mundo, por lo que no sería razonable pensar que una empresa de medios sociales como Twitter pueda operar sin obstáculos debido al alcance de la plataforma en línea. Por estas razones, los gobiernos y las empresas tecnológicas tendrán que trabajar juntos para elaborar una legislación que proteja la privacidad y la seguridad de las personas y, al mismo tiempo, permita un uso seguro de las redes sociales y los servicios en línea.

Aunque aún está por ver el resultado de la demanda de Twitter Inc. contra el gobierno indio, la demanda en cuestión afirma que el bloqueo de tuits en la red social es “una violación de la libertad de expresión garantizada a los ciudadanos-usuarios de la plataforma”. A pesar de ello, las acusaciones vertidas contra Twitter por otros países de todo el mundo han puesto en duda las preocupaciones planteadas en esta demanda, ya que la moderación de contenidos sigue siendo un área de controversia en lo que respecta a la accesibilidad en línea en general. Dicho todo esto, proteger el bienestar de los usuarios en línea debería ser siempre la principal prioridad cuando se habla del uso de las redes sociales, independientemente de las leyes o prácticas empresariales que puedan estar implicadas.